Es domingo, nos despertamos en Balaguer en nuestro segundo día de este fin de semana que hemos dedicado a la visita a esta ciudad de Catalunya. Es temprano, son como las siete y media de la mañana pero no nos ha sonado el despertador; debe ser cosa del cuerpo que nos despierta como cada día cuando suena el despertador y tenemos que ir a trabajar. Pero hoy es diferente, despertar y desayunar en Balaguer hace que aunque temprano, nos levantemos con una gran sonrisa. ¿Qué nos deparará el desayuno de este hotel en el que estamos alojadas?
Mientras nos aseábamos, nos hemos reído recordando la noche anterior al entrar solas en el alojamiento del Palauet de la Muralla, ¡un palacio entero para nosotras! porque no había nadie, salvo los fantasmas si es que estaban. Nos entró un poco de miedo y más con los ruidos que nos parecía oír al meternos en la cama. Sonaba toda la estructura del edificio pero pronto nos quedamos dormidas, por lo visto.
Bajamos a desayunar y nos encontramos con la mesa preparada, estamos solas y eso nos gusta porque vemos que las viandas que nos han preparado son para compartir. Nos hacemos unos cafés con leche y nos sentamos en la mesa. El desayuno se compone de pan para tostar, embutidos de la zona que están riquísimos, mantequilla natural y mermeladas y, para finalizar croissants de mantequilla que están deliciosos. Todo en abundancia y damos buena fe de todo ello.
Poco a poco empiezan a llegar el resto de huéspedes, dos parejas de amigos que se han alojado y una familia que ha pasado le noche y comenta haber disfrutado de las fiestas mayores de Balaguer. Realmente parece un momento de «fonda y parada» de huéspedes del siglo pasado que compartimos un momento de nuestras vidas, explicándonos qué hemos y hacemos en esta zona de Catalunya.
¿Recordáis las películas en las que la trama es un asesinato, por la noche, y luego tienen que adivinar quien es el asesino o asesina? pues nuestra estancia y experiencia en este alojamiento junto con el resto de los 10 huéspedes bien hubiese dado para un argumento semejante. Solo faltaban allí Agatha Cristie o Jessica Fletcher y si se hubiesen sentado a desayunar, no nos hubiese extrañado nada.
Tras ese despertar y desayunar en Balaguer, recogemos las mochilas y nos despedimos del singular alojamiento. Nos toca ver cómo será Balaguer por la mañana. La ciudad se ha despertado tranquila y sólo se escuchan, en la Plaza Mercadal, tambores y grallas de lo que parece ser una ambientación típica de fiesta mayor.
Parada obligada en la Pastelería Muixí
Nos vamos a buscar el coche porque nos toca desplazarnos y salir de la parte antigua de la ciudad. En Balaguer hay una pastelería que tiene dos generaciones de historia pero, sobre todo la actual y ya con mas de 25 años, por ser un maestro pastelero que hace figuras muy difíciles con chocolate y azúcar. Se llama Lluis Muixi.
Ahora, ya nos toca volver a Barcelona pues el fin de semana se está terminando y al medio día debemos estar en la gran ciudad ya que hemos quedado para comer con unas amigas que nos tienen preparada una comida japonesa que nos encanta: Shabu Shabu. A estas alturas de la lectura, pensaréis que nos pasamos el día comiendo, entre el gran desayuno del hotel, luego parar en la pastelería y ahora volver para seguir comiendo y ¡no so equivocáis en absoluto, amigas!
Volviendo por la zona del Sió
El regreso lo podemos hacer o bien por la autovía o bien por carreteras secundarias. Como vamos con tiempo decidimos ir de Balaguer hasta Cervera pasando por toda la zona que se conoce como la zona del Sió. A esta zona le llaman así porque pasa el río Sió que es un afluente del rio Segre. A parte de ser una zona muy bonita, se trata de una zona en la que puedes encontrar castillos, sitios para visitar relevantes durante la guerra civil y diversas poblaciones medievales pequeñas entre otras cosas de mucho interés.
Salimos de Balaguer, por la LV-3025, dirección a Agramunt. Esta población es conocida por sus turrones pero nosotras vamos a parar para comprar chocolate: Chocolates Jolonch. La mayoría de la gente se decanta por los chocolates belgas y demás chocolates de otras tierras; a nosotras también nos gustan y de hecho nos encanta cuanto mas puro mejor. En Jolonch tiene chocolates de todas clases y sabores y no dejan de experimentar sabores pero nos decantamos por comprar unos que son del 90% cacao, que es el que mas nos gusta.
Tras esta deliciosa compra, tenemos el tiempo justo para parar a ver tres castillos que nos van de camino:
- Tomamos la carretera L-303, nos desviamos un momento por la L-304, y paramos en la población de Pallargues, para visitar el castillo de Pallargues. No nos da tiempo a verlo por dentro, que se puede, pero desde fuera ya te traslada a la época medieval. La verdad es que ya lo conocíamos pero siempre nos gusta volver a recordar estos lugares que no son tan comunes como la zona de l´Empordà.
- De vuelta a la L-303, divisamos a lo lejos otra fortificación: El castillo de Aranyó. Este castillo es conocido por estar documentado desde el siglo XIV y, porque nació, Manuel de Pedrolo. ¿A que no lo sabías?. Nosotras tampoco y nos quedamos de piedra cuando lo leemos en un cartel pequeño, a la entrada del castillo, en el que lo explica. Tampoco se puede acceder al interior pero si que disfrutamos rodeándolo mientras jugamos con un montón de gatos y gatas que viven en las inmediaciones.
- Y, la tercera y última parada que hacemos, es en el Castillo de Montcortés. No tiene pérdida como el anterior, pues aparece como una mole enorme a medida que avanzas por la carretera. Este castillo también está cerrado y ojalá lo restaurasen en algún momento porque cada vez que paramos a observarlo, parece que esté mas deteriorado.
Y con esto, ya hemos llegado a Cervera donde volvemos a incorporarnos a la autovía de vuelta a Barcelona. Este fin de semana ha sido completo y lo que parecía un lugar que no podría depararnos grandes cosas, al final nos ha hecho conocer una ciudad, como es Balaguer, cargada de historia y que se remonta a la época del Al-andalus, un alojamiento singular como El Palauet de la Muralla y un retorno cargado de dulces y chocolates con un «bonus-track» en el que hemos podido visitar (por fuera) tres castillos medievales.
Ciertamente Catalunya es muy bonita ¿lo compartes con nosotras?
Te dejamos este enlace para que puedas hacer un paseo por Balaguer.
Mira todo nuestro fin de semana en Balaguer aquí.
Por si quieres preparar tu visita a la zona del Sió, aquí te dejamos información que puede ser útil:
Alquilar un coche para visitar toda la zona del Sió y sus castillos, en Lleida.
Reservar Alojamiento por la zona del Sió.
Reservar Vuelos a Calatunya.
Reservar Excursiones interesantes por la zona.
Muy buen aporte. Gracias por compartirlo.
Gracias Gala! Nos motivas!
Gracias por vuestro reportaje de Balaguer, pero os perdisteis la mejor cafeteria para desayunar y hacer fotos, «El Talladet», con trato familiar, y muy divertido,
Hola Paqui,
Muchas gracias por tu comentario y recomendación. Está claro que tendremos que volver a Balaguer, aunque sólo sea para ir a desayunar a El Talladet. Hasta pronto.